martes, 19 de agosto de 2014

Motivación

Todas las personas tenemos algo dentro nuestro que nos impulsa a salir de la zona de confort. Algo que nos hace luchar contra la comodidad. Esto hace que conozcamos mejor nuestras posibilidades, de lo que somos capaces. Esto hace que entremos en terreno desconocido en búsqueda de nuestros límites. Sabemos que podemos ser mejores de lo que somos, es por eso que tenemos una fuerza interior que debemos despertar para salir a luchar y lograr alcanzar los objetivos que nos propongamos.

El sentido común está muy bien para según qué, pero no es un buen socio de los retos. Retarse es soñar con un objetivo, visualizarlo, estudiarlo, planificarlo, ir a por él.

El éxito en alcanzar retos ha de depender sólo de ti, tú eres el medio para tu fin. Lucha contra todos los factores externos que se interpongan entre tú y tu objetivo.

No tienes que encontrar la motivación en nada que no dependa de ti. No te infravalores, créete capaz para todo, una fuerza de voluntad fuerte hace que la genética sea una mera excusa. Sólo de ti depende la solidez de tu fuerza de voluntad.


Tú eres el creador de tu propia historia


La disciplina es el mejor medio para alcanzar nuestros objetivos, y el enemigo número uno de ella es la comodidad, lo fácil. Haz que llegue el momento en que puedas recorrer el camino para la consecución de tus objetivos como si se tratase de un piloto automático, el cual sólo tú puedes programar.

Es muy fácil levantarse por la mañana y encontrar excusas para desviarte del camino. Prueba a escribir tu historia, si cada día te levantas y haces cosas que no aportan ningún mérito en ti mismo, que tipo de libro vas a poder escribir? Intenta escribir un libro que pasado un tiempo puedas leer y asombrarte no sólo de lo que has logrado, sino de cómo lo has hecho.

Prueba a hacerle un pulso a tu vida y gánale!